jueves, 22 de mayo de 2008

La contribución de los primitivos flamencos


El avance más importante hacia el Renacimiento será el que protagonice la pintura realizada en Flandes durante el S.XV, cuyos pintores protagonizan una aunténtica revolución, tanto por sus valores formales, como por sus novedosas técnicas, entre las que destaca la utilización del óleo.
El óleo permite crear veladuras, como velos de luz a modo de transparencias, conseguidas a base de superponer pinceladas, que dan a las obras un brillo y una minuciosidad nuevas. Aunque esta técnica ya era conocida desde la época medieval, es ahora cuando adquiere una calidad peculiar, aportando a la pintura valores de finura y especial delicadeza, texturas perfectas en los objetos y calidades brillantes que los hacen hiperreales.
Los autores que desracan en esta pintura por su influencia y importancia personal son J.Van Eyck, Roger Van der Weyden, Humberto Van Eyck y Robert Campin.
La obra más importante y famosa de J.Van Eyck es sin duda "El matrimonio Arnolfini" .
El cuadro representa el escenario de una cámara nupcial, donde se retratan dos esposos. Pero no se trata de un retraro cualquiera, sino que es un aunténtico testimonio documental de de los esponsales de estos novios, de lo cual da fe el propio pintor, con su cuadro y su firma, estampada encima del espejo convexo del fondo de la habitación. El propio pintor se autorretrata en el espejo citado contribuyendo a una mayor valoración del artista y de la importancia del arte, algo novedoso para la época. La representación de un interior es muy habitual en la pintura flamenca, por su apego a la vida hogareña, pero además en este caso adquiere todo el simbolismo que da la representación de una alcoba a esta unión matrimonial. Estéticamente la pintura destaca por el protagonismo concedido a la línea; la utilización de la luz que, que gracias al óleo produce una sensación atmosférica brillante y luminosa; y por su naturalismo, delicado y de una minuciosidad exquisita. La línea actúa como elemento compositivo, y como complemento de la sensación de delicadeza que quiere transmitir. Por otro lado, las líneas que converguen hacia el fondo, configuran un esquema de perspectiva lineal que se amplia con el espejo de fondo, dando profundidad. Desde un punto de vista compositivo, la luz proviene de la ventana izquierda, creando así un eje lateral que dinamiza la escena, por lo demás muy estática. La técnica al óleo consigue unas calidades casi palpables en los objetos, lo que se advierte especialmente en la minuciosidad y detallismo de los aspectos más pequeños, llamado realismo sensorial. Pero esta pintura va más allá de la propia realización pictórica, todo el cuadro se configura como un repertorio simbólico que da fe del hecho representado, todos los objetos tienen un valor simbólico. Por ejemplo, la lámpara, con una sola vela encendida, se identifica con la llama sagrada de Cristo, la luz de la fe, que parece así bendecir la unión. El espejo, es además un símbolo de pureza de la mujer que acude virgen al matrimonio, por lo que no puede engañarnos el vientre abultado, eso alude al papel de la mujer como madre. Los tondos que rodean el espejo ilustrandiversa escenas de la pasión de Cristo con lo que se vuelve a insitir en el valor sagrado de esta unión. Sobre la cabecera de la cama aparece Santa Margarita, patrona de los partos. E l perrito es símbolo de fidelidad, las zapatillas, el simbolismo de asistir a un ritual sagrado, por ello están descalzos. Los propios esposos están posando en un gesto de bendición.
Otras obras que podríamos destacar de esta pintura serían "La virgen del canciller Rolín" y "Descendimiento".

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